Efraín Abreu renunció el domingo y adujo “razones personales”.
En horas del pasado domingo, y de forma repentina, el subdirector ejecutivo de la Policía Nacional, Efraín Abreu, renunció a su cargo.
“Con una mezcla de emociones acepté la renuncia al cargo del subdirector ejecutivo de la Policía Nacional Crio. Gral. (R.) Efraín Abreu, por razones personales”, escribió en la red social X Carlos Negro, ministro del Interior.
“Desde su lugar ha sido clave en estos meses de gestión a los que aportó valor con su experiencia, conocimiento y el afectuoso respeto que supo ganarse de superiores y subalternos. Con agradecimiento, el ministerio y la Policía siempre serán también su casa”, añadió.
El senador blanco Nicolás Martinelli, extitular de la misma cartera, lamentó la renuncia del jerarca: “Se va uno de los mejores”.
“Formó a generaciones de policías en la Escuela Nacional de Policía. Compartí con él trabajo, vocación y valores. Su salida es una muy mala señal. Se va un pilar. Y cuando se va un pilar, lo que tiembla es la estructura. Gracias, Efraín, por todo lo que diste”, manifestó en X.
Una llamada telefónica
Este lunes, en el noticiero radial Informativo Sarandí, se expuso una presunta línea de acontecimientos que había conducido a la inesperada renuncia del jerarca.
De acuerdo con dicho informe, todo comenzó con una llamada telefónica de Abreu al Comisario General Alejandro Sánchez, actual Jefe de Policía de Paysandú, y que en el gobierno pasado ocupara el cargo de director de Información e Inteligencia de la Policía Nacional.
La llamada de Abreu a Sánchez tendría como finalidad consultarle acerca de un operativo de inteligencia que en ese momento se estaba llevando a cabo en el Cerro de Montevideo.
Según lo informado por la emisora, a pedido de Abreu, Sánchez se habría comunicado con el director de Coordinación Ejecutiva de la Jefatura de Policía de Montevideo, Comisario Mayor Yony Mezquita, quien había sido su segundo al mando durante la ya mencionada gestión anterior. Esta movida llegó a oídos de su superiora, la directora de Información e Inteligencia Policial, Comisaria Mayor Ana Sosa.
El informe detalla que Sosa apeló a su vez a sus superiores, ante los que protestó enérgicamente por lo que estaba ocurriendo.
Así las cosas, y a las puertas de una situación de crisis o escándalo, Abreu habría optado por la renuncia.