Un brasileño pobre necesitaría vivir nueve generaciones para alcanzar la clase media

Un brasileño pobre necesitaría vivir nueve generaciones para alcanzar la clase media

Un estudio revela que la movilidad social en Brasil es una de las más restringidas del mundo.

Uno de los mayores orgullos de Adalberto Gonçalves Júnior, de 36 años, es ver a su hijo Jhonatan, de 15 años, estudiando en el Colégio Mackenzie, uno de los más tradicionales de São Paulo.

El placer de Júnior no se limita al hecho de que su único hijo estudie en una institución prestigiosa. Se debe a que, cuando tenía la edad de Jhonatan, Júnior vivía en las cercanías del Mackenzie, pero en la calle. Hoy en día, él y su esposa, Joyce, de 34 años, tienen su propio puesto de comida ambulante.

El ejemplo del exindigente que se convirtió en empresario es un caso rarísimo en la pirámide social brasileña. Según un estudio de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), el brasileño que se encuentra entre el 10% más pobre de la población necesitaría nueve generaciones, o sea, 180 años, para alcanzar la clase media brasileña.

El estudio, realizado en 2018, analiza la cantidad de generaciones que la población más pobre de 24 países miembros de la OCDE necesita para llegar a la clase media. Los resultados varían desde dos generaciones en Dinamarca hasta siete en Hungría, con una media de 4,5 generaciones.

El análisis también estudió el tiempo necesario para que el 10% más pobre de los países emergentes alcance la clase media: con nueve generaciones, Brasil solo es superado por Colombia. (FOLHA INTERNACIONAL)