Sangría de yeguas: un cruel maltrato animal que pocos conocen y que las ONG animalistas piden sea eliminada
El puntapié lo dio la Junta departamental de Canelones, donde el pasado 8 de febrero se aprobó la prohibición de la actividad en todo el territorio de aquel departamento. Lo siguió el deliberativo departamental de Maldonado que este el pasado 9 de abril siguió el mismo camino que los canarios. Es que la sangría de yeguas es una actividad inhumana, cruel, que cuesta creer que haya personas que acepten realizarlas. Lo llamativo es que hace dos años un proyecto que prohíbe esta actividad en el país duerme en los cajones de la cámara baja.
PERO ¿QUE ES LA SANGRÍA DE YEGUAS?
Según relató Cesar Vega a CAMBIO “cuando la yegua tiene que mantener el feto genera la hormona Gonadotropina coriónica equina y mientras tiene el feto en el vientre le sacan sangre más o menos una vez por semana, y del plasma de esa sangre se saca la hormona. Luego se la hace abortar, para no perder el tiempo, y no tener que criar potrillos, y se la preña nuevamente para así, todos los años (repetir el ciclo), hasta 10 años, (Se dijo en comisión que se llega hasta 12 años con esta dinámica, para luego terminar en frigorífico”, afirmó.
¿PARA QUÉ SE USA LA GONADOTROPINA?
El representante del PERI explicó que “la hormona se usa para poder sincronizar los celos de las cerdas, en grandes establecimientos porcinos que tienen miles de hembras, pero no usan machos para nada. Primero hay que sincronizar el celo, porque así los cerditos nacen todos, el mismo día, y después se las insemina”. “Lo más lindo”, continuó, “es que se puede hacer sin esta hormona, por dos motivos: Primero porque tenés una (hormona) sintética y segundo porque naturalmente y yo lo sé porque crie cerdos, se puede hacer naturalmente porque la hormona de la sincronización del celo la genera un macho “padrillo” – como le decimos en campaña-. Y a pesar de que el macho no monte a la hembra, le provoca el celo. Pero como ellos (Los criaderos) no quieren tener ningún tipo de trabajo, solo se dedican a las madres y los lechones, que están en esas jaulitas donde las madres no se pueden ni dar vuelta. Por lo tanto acá estamos hablando de dos maltratos: El maltrato a las yeguas y el maltrato a las cerdas en Europa, China o Brasil, que son los destinos más grandes de todo esto”.
EL PROYECTO
Vega dijo además que su proyecto fue presentado en la cámara de diputados hace dos años y “tiene como objetivo prohibir la sangría de yeguas y la prohibición de la venta de Gonadotrofina coriónica equina”. Explicó también “que el proyecto se presentó donde debe entrar, que es la comisión de Ganadería Agricultura y Pesca y de ahí pasó a la comisión de Bienestar Animal, y allí tomó vida propia, porque todas las ONG animalistas empezaron a pedir para hablar del proyecto.
Después pidieron para hablar las empresas, después tuvo que venir en INBA, después el colegio de veterinarios recién formados, y después pasó lo que pasó ahora en las Junta departamentales de Canelones y de Maldonado”.