Programa Uruguay Trabaja reacondiciona centros educativos de la ciudad y el interior

Programa Uruguay Trabaja reacondiciona centros educativos de la ciudad y el interior

El Programa Uruguay Trabaja del Ministerio de Desarrollo Social (Mides) realiza intervenciones en los centros educativos de la ciudad e interior del departamento ante el comienzo del año lectivo con obras de pintura y reacondicionamiento. Las autoridades esperan a mediados de este año la instrumentación de Accesos, el programa que sustituirá a Uruguay Trabaja, con una primera fase de trabajo protegido una segunda de vinculación laboral con empresas privadas, con el objetivo de adquirir una mayor autonomía al finalizar el proceso. En Quebracho, un total de 15 beneficiarios “reacondicionaron en menos de un mes el CAIF Rayito de Sol, que es el único en la ciudad y asisten 68 niños. Es un espacio de 1.600 metros, donde se hizo una puesta apunto de la cancha multiuso, muy importante para los niños y sus familias. El equipo hizo trabajos que van allá de su tarea específica, como el pintado de la parte didáctica con la rayuela y el acondicionamiento del patio”, dijo el director adjunto del Mides, Alejandro Colacce. En Chapicuy “se realizaron trabajos de recuperación en la Escuela Nº54, que es compartida con el liceo, con pintura y acondicionamiento de los salones, también a cargo de 15 personas. En Piedras Coloradas, trabajaron otras 15 personas en el complejo deportivo que fue utilizado por los bomberos como base central para el combate a los incendios, además de los salones de la capilla. Después se trasladaron a Orgoroso y realizaron el acondicionamiento de los espacios verdes y las letras de ingreso a la localidad”, señaló a EL TELEGRAFO. En Guichón, “unas 35 personas recuperaron el centro de barrio, el Correo y la biblioteca municipal. En Paysandú, también 35 beneficiarios, trabajan esta semana en la recuperación de la Escuela Nº11”. Colacce destacó “la articulación con la Intendencia y Primaria, que ponen la materia prima y el Mides el trabajo, además de la articulación con los municipios. Eso genera un sentido de identidad y pertenencia porque hablamos de personas que viven en las mismas comunidades en las que trabajan y en tiempos de adversidad, nos permite avanzar y ver las cosas positivas que quedan en sus pueblos”. (El Telégrafo)