La Policía Federal dice que la Policía Civil de Río se ha convertido en un mostrador de negocios para ‘bicheiros’ y paramilitares
Los investigadores del caso Marielle señalan que el inspector Rivaldo Barbosa creó una organización criminal en el seno de la policía.
En el informe sobre los presuntos autores intelectuales del asesinato de Marielle Franco y Anderson Gomes, la Policía Federal utiliza varias docenas de páginas para presentar una percepción basada en otros casos y eventos de los últimos años: la Policía Civil de Río se ha convertido en un mostrador de negocios al servicio de bicheiros (dueños de juegos ilegales de azar) y paramilitares.
Los investigadores se refieren específicamente al período de 2015 a 2019, durante la gestión de Rivaldo Barbosa, quien fue arrestado el domingo pasado (25), acusado de haber planeado los asesinatos junto a los hermanos Chiquinho Brazão (União Brasil-RJ) y Domingos Brazão, consejero del TCE (Tribunal de Cuentas de Río).
El agente niega las acusaciones y afirma ser inocente. Barbosa asumió el liderazgo de la División de Homicidios en octubre de 2015 y se mantuvo hasta marzo de 2018, cuando fue nombrado jefe de la Policía Civil, cargo que ocupó hasta 2019, con el fin de la intervención federal en Río de Janeiro.
La elaboración de este escenario se utiliza para reforzar la conclusión de que Rivaldo Barbosa también estuvo involucrado en el caso Marielle, actuando de manera similar a otros episodios enumerados por la Policía Federal. «Como se observó en líneas anteriores, la División de Homicidios de la Policía Civil de Río de Janeiro, dirigida por Rivaldo Barbosa, se convirtió en un entorno pernicioso donde las organizaciones criminales de diversas índoles encontraron un refugio para la impunidad de sus crímenes», afirmó la Policía Federal en el informe sobre los asesinatos.
También de acuerdo con los investigadores, la actuación de Barbosa creó una organización criminal dentro de la Policía Civil, sospechosa de cometer diversos delitos, como corrupción, obstrucción, tráfico de influencias e incluso fraudes procesales y abuso de autoridad. (Folha Internacional)