La guerra en Ucrania y una inflación desbocada ensombrecen el horizonte económico mundial
l Fondo Monetario Internacional disminuye sus proyecciones de crecimiento global para 2022 y 2023 y las fija en un 3,6%. El aumento de la inflación “se ha convertido en un riesgo claro e inminente” y el alza de precios de los alimentos y los combustibles perjudicará a los consumidores con menores ingresos en todas las regiones del mundo
Mientras la economía mundial sigue recuperándose de la crisis causada por la pandemia del coronavirus, el Fondo Monetario Internacional arrojó este martes otro jarro de agua fría sobre las perspectivas financieras globales e indicó que la guerra en Ucrania desacelerará el crecimiento económico y avivará la inflación.
En su reciente actualización, la organización financiera revisó a la baja sus proyecciones de crecimiento mundial al 3,6% tanto para este año como para el que viene, una estimación inferior a la prevista en enero.
La corrección del Fondo se debe principalmente al impacto directo de la guerra en Ucrania y a las sanciones impuestas a Rusia, que provocan marcadas contracciones para ambos países.
De este modo, las perspectivas de crecimiento de este año para la Unión Europea se verían recortadas al 1,1% por los efectos indirectos de la guerra.
El Fondo también proyecta un mínimo crecimiento para América Latina y el Caribe durante este año y cifra en un 2,5% su alza total anual, tanto en 2022 como en 2023. (Noticias ONU)