Horacio de Brum denuncia «parálisis inaceptable» en el BHU de Salto tras tres meses del ciberataque
El diputado por Salto, Horacio de Brum, alzó la voz ante lo que califica como una crisis de gestión sin precedentes en la sucursal local del Banco Hipotecario del Uruguay (BHU). A casi 90 días del ciberataque que vulneró los sistemas de la institución, los usuarios salteños continúan atrapados en un laberinto burocrático que impide el acceso a la vivienda y el cumplimiento de trámites esenciales.
Un sistema «en pausa» que castiga al interior
La situación en la sucursal de Salto es crítica. Lo que comenzó como un problema técnico se ha transformado en una barrera institucional. Según denunció el legislador, la imposibilidad de abrir nuevas cuentas y la inactividad de los canales digitales han forzado a los clientes a depender de gestiones manuales lentas y obsoletas. «No es solo un problema técnico; es un ejemplo de cómo la falta de previsión deja a cientos de usuarios del interior en un estado de abandono absoluto», afirmó De Brum.
Para las familias salteñas, las consecuencias no son solo administrativas, sino económicas y emocionales. Entre los puntos más graves señalados destacan:
* Bloqueo de créditos: La imposibilidad de avanzar en gestiones de préstamos hipotecarios.
* Web inoperante: El portal oficial sigue sin recuperar su funcionalidad plena, limitando el derecho a la información de los ahorristas.
* Falta de transparencia: La ausencia de un cronograma claro de normalización genera incertidumbre en quienes tienen sus ahorros y proyectos de vida comprometidos.
El diputado fue tajante al señalar que el tiempo de espera ha sobrepasado cualquier margen de tolerancia. La falta de respuestas oficiales por parte del BHU es, a su juicio, «inaceptable».
Desde su banca, de Brum exige que la institución asuma su responsabilidad, brinde explicaciones públicas y restablezca de manera inmediata la atención de calidad. El reclamo subraya una demanda histórica del departamento: que los servicios públicos en el interior funcionen con la misma eficiencia y urgencia que en la capital.
Mientras el banco intenta recomponer su infraestructura digital, los ciudadanos de Salto siguen pagando el costo de una crisis tecnológica mal administrada que, hoy por hoy, mantiene frenado el acceso al crédito hipotecario en el litoral norte.