Exportaciones: la alegría va por rubro

Exportaciones: la alegría va por rubro

Las cosechas están retrasadas, pero las ventas de granos al exterior ya ponen la facturación por exportaciones arriba de 2023. Brasil se afirma como principal mercado. Persisten problemas de competitividad.

Las exportaciones de bienes subieron 27% interanual en abril, medidas en dólares. El dato mensual puede incorporar algunas particularidades (efecto Semana Santa, por ejemplo) por lo que es más ilustrativo el dato acumulado. Allí se registra un aumento del 5% en dólares en los primeros 4 meses del año, comparado con el mismo periodo del año pasado, según datos de Uruguay XXI.

En abril comenzó a visualizarse con más ponderación el ingreso de la cosecha de soja, con ventas por US$ 134 millones, más de 60% por encima del mismo mes del año anterior. En los próximos meses este renglón irá separándose del dato del año previo para llevar las exportaciones a un nivel más alto.

La agricultura también aumentó su aporte a través del maíz, que sumó exportaciones por US$ 28 millones acumulados, producto de la muy buena cosecha de este año, que ha permitido varios negocios de exportación. Asimismo, más que se duplicó la exportación de trigo que superó los US$ 200 millones en el cuatrimestre (la cifra aumenta si se consideran las exportaciones tempranas de esta zafra, en diciembre). También hay un aumento, más modesto, en las exportaciones de malta de cebada, que superan los US$ 100 millones en el primer cuatrimestre. Más fuerte fue el avance en las exportaciones de cebada que superaron los US$ 50 millones en el cuatrimestre, casi el triple respecto al año anterior. Retrocedieron las exportaciones de colza por la menor cosecha y la caída de precios respecto al año anterior.

En el total del primer cuatrimestre las exportaciones de cereales (incluyendo el arroz), superaron los US$ 400 millones casi 50% por encima del año pasado, según datos de la Unión de Exportadores del Uruguay (UEU). En oleaginosos aún estamos por debajo por el efecto de la colza, pero este año mostrará -a partir de los próximos meses- una gran exportación de soja, aun con las dificultades que se están dando en la cosecha.

Al momento de evaluar las exportaciones de granos también es interesante observar los volúmenes. Según el informe mensual de la UEU, en cereales las exportaciones superan el millón y medio de toneladas, más del doble de lo registrado en igual cuatrimestre del año pasado. En el caso de las oleaginosas hay un avance de casi 10% en el volumen exportado, que se seguirá ampliando.

China y EEUU.

En el sector cárnico el monto por exportaciones de carne bovina en el primer cuatrimestre es prácticamente el mismo que en el mismo periodo del año anterior. Sin embargo, hay una importante diferencia en los destinos, por la caída en la importancia de China y el aumento que se ha registrado en las ventas a los Estados Unidos, donde hay una circunstancia especial por la caída en el stock vacuno, que motiva un fuerte aumento en los precios de la carne en ese gran mercado. De tal manera que -tomando exclusivamente el mes de abril- las ventas a Estados Unidos son prácticamente iguales a las ventas a China, algo inédito en los últimos años. Exportadores de la industria frigorífica señalan que este empuje del mercado estadounidense será difícil de sostener a estos niveles, aunque Estados Unidos y el Nafta en general seguirán siendo un mercado clave este año y seguramente en los próximos.

Medidas en volumen físico, las exportaciones de carne han subido algo más de 7% en lo que va del año. El sector está buscando transitar la caída en la demanda china, que paga precios menores, en un mercado internacional muy competitivo con Brasil vendiendo grandes volúmenes a precios bajos. Europa se mantiene como mercado clave, en particular por la cuota Hilton y también se han ampliado los negocios con Rusia y algunos otros mercados, que completan el abanico en el que se mueve la industria frigorífica para sacarle el mayor valor posible a las cabezas faenadas.

Las exportaciones de lácteos muestran una caída del 17% en la facturación en lo que va de este año, principalmente por la baja en los precios de venta. En volumen la caída es de menos del 3%. Brasil sigue siendo el mercado clave, a pesar de algunas dificultades que emergen en la frontera. Las Industrias uruguayas buscan completar ese gran mercado -que se ha vuelto muy predominante- con negocios en Argelia y otros destinos, en América y en el África.

EXPORTACIONES.

 

Nuevo líder.

Como era de esperar con la puesta en marcha de la nueva planta de UPM en Paso de los Toros, la celulosa ha pasado a ser el principal producto de exportación del Uruguay. En el primer cuatrimestre las exportaciones de celulosa acumulan más de US$ 750 millones, 10% de aumento respecto al año pasado. Uno de cada 5 dólares que Uruguay ingresa por exportaciones, corresponde a celulosa. Es el resultado de las gigantescas inversiones en las plantas, en un mercado muy competitivo en el que Uruguay logró posicionarse de manera exitosa. Junto con la celulosa, el sector forestal también suma exportaciones de productos de madera, por algo más de US$ 150 millones en el primer cuatrimestre; en este caso hay un descenso del 13% (cuadro).

Fuera de los agronegocios, el tercer producto en el ranking de exportaciones son los concentrados de bebida que se exportan desde la planta de Pepsico en la Zona Franca de Colonia; han tenido un aumento del 20% en el monto exportado respecto al año pasado, superando los US$ 250 millones en el cuatrimestre. Las exportaciones de vehículos también han tenido un avance importante (casi 30%) con US$ 150 millones de dólares facturados por las terminales uruguayas, con destino preferentemente en la región. A su vez, los productos farmacéuticos superaron los US$ 100 millones exportados entre enero y abril, un aumento del 15% respecto al año pasado. Se exportan principalmente desde la zona franca Parque de las Ciencias.

EXPORTACIONES

 

Competitividad.

Dada esta dinámica exportadora -y recordando que Uruguay también exporta servicios- el retorno al crecimiento en las ventas al exterior no parece ser síntoma de dificultades de competitividad. Sin embargo, las hay: por un lado, hay que ver que buena parte de la dinámica exportadora surge de zonas francas, regímenes especiales justificadamente habilitados y de positivo impacto en el Uruguay para desarrollar negocios que, seguramente, de otra manera no se estarían captando. Pero esto no quiere decir que los sectores que trabajan en el régimen corriente de la economía uruguaya no enfrenten limitaciones. En particular aquellas empresas con plantilla de trabajadores más grandes y que tienen destinos regionales.

Por supuesto, en toda economía hay sectores más dinámicos que otros y lo virtuoso es darle espacio a aquellos con posibilidades de crecimiento, facilitando la reformulación o adaptación de los rubros que enfrentan restricciones. En ese camino hay costos que son inevitables. Pero también tiene que ayudar la competitividad global del Uruguay y allí es donde hay tareas pendientes. Sin ir más lejos, el Tipo de Cambio Real está en fuerte caída (gráfica).

Ya hemos comentado que la política monetaria contractiva -con su impacto en el tipo de cambio- es un dato de estos meses y seguramente seguirá hasta que las expectativas de inflación bajen a los niveles que quiere el Banco Central. Mientras, el déficit del Estado ha vuelto a subir a niveles que merecen atención: un 4% del PIB, un nivel que no es sostenible. Es de esperar que el déficit se atenúe en la medida que la propia economía mejora, superada la sequía y con Argentina que -sin llegar a ayudar- al menos dejaría de perjudicar: nuestros vecinos están encausando un plan de estabilización a marcha forzada y los precios relativos han dado un vuelco a favor del Uruguay. Esperemos que los buenos niveles de consumo real y potencial que tiene nuestra población, con alto nivel de empleo y salarios, se queden en mayor medida en el Uruguay de manera de dinamizar la recaudación. Pero en asuntos de Estado y gasto estatal, aún hay mucho por mejorar.

Y además, persisten los problemas de inserción internacional. Si bien este asunto sigue en la agenda, hay más frustraciones que avances. Desde la UE se dan señales de que el acuerdo con el Mercosur está vivo y queda poco para concretarlo. Pero del dicho al hecho…

Exportaciones enero abril

 

Rurales El País