Colectivo de ollas y merenderos continuará sus actividades durante el verano
Miles de ciudadanos salteños sufren de inseguridad alimentaria, muchas veces atenuadas por el colectivo de ollas y merenderos que funciona en nuestra ciudad, CAMBIO dialogó con una de las tantas integrantes de dicho grupo para saber cuáles serán las acciones que llevarán adelante durante el verano.
Rosalía Rodríguez expresó que el colectivo de ollas y merenderos solidarios de Salto seguirá trabajando, porque cada vez hay más ciudadanos que se acercan a las ollas y también hubo un aumento importante en cuanto a los niños que concurren a buscar su alimentación en esos lugares, expresó que se viene una época de mucho calor, muy difícil para estar al lado del fuego a leña o de una cocina a gas, pero existe numerosa cantidad de personas que están necesitadas en Salto.
Rodríguez dijo que lo único que se estaría cambiando sería el menú en la merienda y se estudia la posibilidad de hacer cambios en la cena, todos estos temas se estarán resolviendo en la reunión de directiva, lo importante es que en ningún momento se consideró detener el trabajo de las ollas, todo lo contrario, al ver las necesidades que existen en la población es imposible que se tome una decisión de esa naturaleza, a pesar que el MIDES sigue completamente ausente.
En este momento el colectivo de ollas y merenderos continúa recibiendo de la intendencia de Salto $U 250 mil y se sigue recibiendo donaciones de productores de chacras y de ciudadanos solidarios que hacen sus pequeñas donaciones a la red de ollas, todo es bienvenido porque todo suma, afirmó Rodríguez.
La referente de ollas dijo que aquellas personas que quieran colaborar pueden acercarse a cualquier puesto que existe en la ciudad, los insumos necesarios son verduras, carne y alimentos secos, todo será bienvenido ya que cada vez hay más comensales.
NECESIDADES INSATISFECHAS
Las Ollas populares inicialmente se constituyeron como una forma de organización transitoria vinculadas a las huelgas sindicales y a las tomas de los terrenos, pero en los años 80 adquieren un carácter permanente intentado mayor estabilidad y autosuficiencia frente a la necesidad básica de alimentación.
Cuando surgió la crisis sanitaria el Grupo de Acción Universitaria en la Emergencia Social del Centro Universitario Regional (Cenur) Litoral Norte en respuesta a la crisis sanitaria, elaboró un informe que dio como resultado que en la oportunidad hubo 61 ollas, a las cuales acceden aproximadamente 1200 familias de Salto, unas 10.000 personas.
En una estimación que realizó el grupo, se cubrían 24.000 porciones diarias, de las cuales la Intendencia aportó 5000, por lo tanto, había 19.000 porciones que están siendo abastecidas a través del esfuerzo de la comunidad salteña y distintas organizaciones de todo tipo. Cabe destacar que, si bien hubo reducción de comensales desde la pandemia hasta el momento, las dificultades continúan siendo las mismas debido a las carencias de todo tipo que tienen las organizadoras de las ollas. (DIARIO CAMBIO)