Aumentan las denuncias de violencias sexual en Ucrania
La encargada de la ONU sobre violencia sexual en conflicto denuncia que este tipo de agresión es una de las más sistemáticas y menos denunciada, y que los datos disponibles, con 124 denuncias hasta el momento desde la invasión rusa, sólo representan la punta del iceberg.
La representante especial del Secretario General sobre la Violencia Sexual en los Conflictos denunció este lunes ante el Consejo de Seguridad que a medida que el conflicto en Ucrania supera la marca de los 100 días crecen las denuncias sobre este tipo de agresión.
Pramila Patten reveló que, debido a las hostilidades en curso, los masivos desplazamientos internos y la interrupción de los servicios y el estigma asociado a la violencia sexual, las víctimas a menudo no han podido o no han querido denunciar estos sucesos a las autoridades policiales o a los profesionales dedicados a estos servicios, especialmente en el este de Ucrania.
De los veinte centros médicos y maternidades que, con apoyo del Fondo de Población de la ONU, prestaban asistencia a las supervivientes de la violencia de género antes de la ofensiva rusa a finales de febrero, solo funcionaban nueve a 18 de abril.
Añadió que en el actual contexto muchas de las denuncias de violencia sexual relacionada con el conflicto son difíciles, si no imposibles, de verificar, lo que dificulta la evaluación de su frecuencia.
“Hasta el 3 de junio, el Equipo de Vigilancia de los Derechos Humanos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha recibido informes de 124 presuntos actos de violencia sexual relacionada con el conflicto, ocurridos contra mujeres, niñas, hombres y niños en las regiones de Chernihiv, Dnipropetrovsk, Donetsk, Kharkiv, Kherson, Kyiv, Luhansk, Mykolaiv, Vinnytsia, Zaporizhzhia, Zakarpattia y Zhytomyr”, especificó.
La mayoría de las víctimas son mujeres con 56 denuncias, seguidas por las 49 acusaciones contra menores (41 contra niñas, siete contra niños, una de género desconocido) y 19 alegaciones contra hombres.
Patten explicó que, debido a su experiencia en este campo, la violencia sexual es la violación más sistemática y menos denunciada, y que los datos disponibles sólo representan la punta del iceberg.
“Un campo de batalla activo nunca es propicio para llevar una «contabilidad» precisa. Pero si esperamos a disponer de datos y estadísticas sólidas, siempre será demasiado tarde. Por eso debemos movilizarnos inmediatamente sobre la base de nuestra convicción común de que incluso un solo caso de violencia sexual es inaceptable. No necesitamos datos concretos para ampliar la respuesta humanitaria, ni para que todas las partes pongan en marcha medidas preventivas”.