Alfonso Tucci: «El escenario es sumamente positivo, tanto desde el punto de vista climático como de los precios» para el negocio de la cría

Alfonso Tucci: «El escenario es sumamente positivo, tanto desde el punto de vista climático como de los precios» para el negocio de la cría

El negocio de la cría en Uruguay atraviesa un momento de optimismo. En un análisis sobre el escenario actual, el ingeniero agrónomo Alfonso Tucci, asesor en la zona de Guaviyú del Arapey, Salto, destacó que la producción se beneficia de un panorama «sumamente positivo» impulsado por la favorable combinación de un buen clima y altos precios.

En diálogo con Valor Agregado Norte, Tucci abordó las dinámicas del sector, poniendo énfasis en la coyuntura de la cría y la perspectiva para los criadores en esta etapa del año.

Clima favorable y control de la garrapata
Respecto a las condiciones meteorológicas, el ingeniero agrónomo señaló que el arranque de la primavera en la zona de Guaviyú del Arapey ha sido «muy bueno». A pesar de las lluvias dispares, el factor climático ha sido propicio, en parte gracias a un invierno largo con bastantes heladas que, según Tucci, fue de gran ayuda para «atacar fundamentalmente el tema de la garrapata», una preocupación latente en el norte del país.

«Ahora ya ha venido con temperaturas sumamente buenas y se nota claramente el crecimiento del pasto», afirmó, sugiriendo un buen inicio de la estación.

En cuanto a la garrapata, Tucci comentó que existe una percepción de que el problema está «más tranquilo» en muchos predios, principalmente porque los productores han arrancado los tratamientos de forma anticipada y han tomado «mucho más medidas». No obstante, advirtió que es una «batalla que no se le puede dar respiro» y que sigue muy presente en muchos establecimientos.

Precios de la ternerada: una devolución económica importante
El análisis del mercado de haciendas arrojó cifras alentadoras para los criadores. Tomando como referencia remates recientes, Alfonso Tucci calificó los valores de la ternerada como «sumamente positivos», indicando que «van acompañando bastante la tónica del ganado gordo».

Subrayó el valor que está recibiendo el ganado «al bulto», destacando que un ternero liviano de 140 kilos que se venda a $500 al bulto es un valor «extremadamente bueno».

Además, resaltó que los valores se mantienen firmes para la ternerada pesada (240-250 kg), lo que le permite al productor que invirtió y pasó el invierno con sus terneros tener «una devolución económica importante».

Sin embargo, el asesor puso un punto de atención en la necesidad de que esta tónica de precios se sostenga. «Los criadores, los terneros recién están naciendo. Es importante que estos precios se mantengan por lo menos seis o siete meses más para tener un ternero de venta que cifre», enfatizó.

Inversión en genética y demanda del mercado
Consultado sobre la conveniencia de invertir en genética y reponer toros en este escenario de precios, Tucci se mostró optimista. Considera que el panorama es «bastante bueno», ya que la relación entre la cantidad de terneros necesarios para comprar un toro se mantiene dentro de los parámetros históricos.

«Creo que el productor está entusiasmado y está recibiendo buenos valores tanto de ternero como de ganado gordo, por lo que salir a comprar un toro, si bien uno sabe que han subido 15, un 20%, es algo que está con una buena devolución», explicó.

Adicionalmente, el ingeniero agrónomo proyectó que el escenario invita a «entornar bastante ganado» y que la «máquina» productiva debe seguir funcionando. En este punto, hizo hincapié en el rol de la exportación de ganado en pie, especialmente de vaquillonas preñadas, que ha generado una gran demanda en el mercado.

El rol de la exportación en pie
Alfonso Tucci subrayó el papel «muy, muy positivo» que ha tenido la exportación de ganado en pie para el negocio de la cría, ya que «abre un abanico de ventas mayor» y le ha puesto un «piso» al precio del ternero.

Si bien reconoció que el ternero entero ha quedado «un poquito relegado frente a lo que es un ternero castrado», los valores siguen siendo muy buenos. El factor clave, según Tucci, es que la posibilidad de vender categorías como una vaca preñada a un valor similar o igual al de una vaca gorda, sumado a la compra de novillos formados, genera una demanda constante. «Que haya demanda, es lo que precisan los productores», concluyó.