«La sanidad es fundamental y hay que asumir la responsabilidad»: Rosalino Bonini tras la Asamblea 110 de Comisión Nacional de Fomento Rural

En una jornada marcada por un fuerte intercambio entre las bases productivas y autoridades de gobierno, la Comisión Nacional de Fomento Rural (CNFR) celebró su Asamblea número 110. Tras el evento, Rosalino Bonini, directivo de la CNFR y productor salteño, dialogó con Valor Agregado Norte, ofreciendo un análisis profundo sobre el rumbo del gobierno en el sector agropecuario, las preocupaciones sanitarias y las necesidades urgentes de la agricultura familiar.

La Asamblea: un espacio vital de intercambio
Bonini destacó la gran participación en la Asamblea, que incluyó tanto a integrantes de la gremial como a altas autoridades del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), incluyendo al Ministro Interino, Juan Ignacio Buffa, y directores de áreas e institutos como el Instituto Nacional de la Leche (Inale) y Colonización, muchos de ellos con vínculos históricos con la CNFR.
«La 110 Asamblea de Comisión Nacional fue un espacio donde los productores pequeños y medianos del Uruguay pueden dar su opinión y las dudas que tengan o lo que esperan para su producción,» explicó Bonini. Subrayó la importancia del diálogo entre los productores de las bases y el gobierno actual, señalando que el Ejecutivo está «pensando mucho en el productor pequeño, en el productor familiar.»

Foco sanitario: la garrapata y la responsabilidad del productor
Uno de los temas que generó mayor interrogante y preocupación fue la sanidad animal, específicamente la problemática de la garrapata y las nuevas medidas anunciadas por el MGAP. Las recientes detecciones de residuos de garrapaticidas en China han puesto en alerta al sector y al gobierno, impulsando un paquete de cinco medidas, incluyendo el aumento de sanciones a profesionales.

Bonini, como productor, respaldó la dirección de las medidas: «Me parecen correctas, o sea, son las medidas que están dentro de la ley, que ya estaban, creo que no hay nada nuevo, lo que pasa es que se van a empezar a aplicar en todo su esplendor.»
El directivo fue enfático en la necesidad de que el productor asuma su rol:

«La sanidad es fundamental para que un país que produce el gran porcentaje de sus entradas donde tiene la ganadería, tiene que saber que es una gran responsabilidad la que tiene y con esa responsabilidad lo tiene que tomar su negocio, su negocio es la base del país productivo.»

Bonini apeló a la idiosincrasia uruguaya, advirtiendo que a veces se «afloja» si no hay presión económica o normativa, por lo que las medidas, aunque «no son lindas ni simpáticas,» son necesarias y deben asumirse.

El tiempo de espera y el alivio crediticio
Una de las preocupaciones planteadas por los productores más pequeños fue el plazo de cuarentena para el uso de medicamentos, sugiriendo llevarlo a 90 días, lo que impacta directamente en la liquidez. En este punto, Bonini valoró la presencia y respuesta del Banco de la República (BROU) en la Asamblea.

«Se plantea que el productor chico necesita ese dinero, necesita el dinero de la venta, lo necesita en ese momento,» reconoció. «Me pareció importantísimo que la directora [del BROU] dijera que no puede dar un crédito o algo como para esperar ese tiempo de espera del medicamento, que a veces es muy necesario ese dinero para vivir.»

Esto, según Bonini, sería un alivio necesario para que los productores puedan cumplir con las exigencias del mercado exterior, donde Uruguay debe «agachar la cabeza y decir que sí, que lo vamos a hacer, lo vamos a hacer bien.»

Presupuesto y enfoque en la producción familiar
Respecto a la ley de presupuesto y los recursos destinados al sector, Rosalino Bonini manifestó que, si bien «la frazada es corta,» el gobierno parece estar bien enfocado.

«Creo que lo van a tratar de dar la mayor cantidad de dinero para Digegra, para todo el sistema de granja y pequeños productores,» afirmó, expresando también la esperanza de que aumenten los recursos para la Etrocría para que más productores puedan acceder. Bonini concluyó que la administración de los recursos será un desafío, y que el foco de los productores debe ser maximizar la producción por hectárea.

La agricultura familiar: tierra y créditos blandos
Al cierre de la entrevista, Bonini definió con claridad los dos principales reclamos y necesidades de la agricultura familiar hoy:
–  Tierra: Necesaria para «fincar a las personas en el medio rural.»
– Créditos: Imprescindibles para que esas personas puedan salir adelante.
Enfatizó que estos deben ser «créditos muy blandos» y «a largo plazo» para poder poblar los campos y que la tierra, que pueda otorgar Colonización o un instituto similar, sea productiva.

 «El que le gusta el campo, el que le gusta la producción, sabe salir adelante y donde vos le das las posibilidades, lo logras,» sentenció Bonini, dejando claro que más allá de enfocarse en jóvenes o mujeres, el verdadero productor, con las herramientas adecuadas, siempre sale adelante.