Crisis de hoteles en Belém moviliza a diplomáticos, y temen impacto en las negociaciones de la COP30
El tema ya se trata en diversos espacios, incluso dentro de la ONU y en un retiro informal de negociadores.
Desde 2024, el gobierno de Azerbaiyán organiza un retiro para negociadores de varios países que participan en la COP, la conferencia climática de la ONU, con el objetivo de distender los debates y crear un espacio menos formal.
En la edición de este año, un tema fue abordado informalmente por los delegados: la crisis de alojamiento que amenaza la realización del evento, previsto para noviembre en Belém.
Tres diplomáticos, incluido uno de Azerbaiyán, confirmaron a Folha que los precios exorbitantes de los hoteles fueron tema de conversación entre los negociadores. Según uno de ellos, esto ilustra la magnitud que ha cobrado el asunto en el debate climático y el riesgo que representa para la COP30.
La evaluación es que, hasta ahora, la crisis no ha afectado directamente las negociaciones en sí, dado que la presidencia brasileña ha conseguido avanzar con los textos durante los debates preparatorios. Sin embargo, la molestia de varios países por las tarifas diarias ha ido en aumento.
El asunto se ha convertido en un rumor recurrente entre negociadores y, según quienes siguen las tratativas, cada vez contamina más las conversaciones.
Si el problema no se resuelve, existe el riesgo de que delegaciones cancelen su viaje a Brasil, lo que pondría en duda la credibilidad de los acuerdos alcanzados durante la conferencia.
Folha Internacional