Las fuerzas fronterizas británicas practican las primeras detenciones tras el acuerdo con Francia: «un inmigrante entra, otro sale»

Las fuerzas fronterizas británicas practican las primeras detenciones tras el acuerdo con Francia: «un inmigrante entra, otro sale»

En virtud de este plan, anunciado el mes pasado, Francia aceptará a emigrantes retornados a cambio de que el Reino Unido acoja a un número igual de solicitantes de asilo que tengan lazos familiares con Gran Bretaña.

Las autoridades fronterizas británicas dijeron el jueves que habían detenido al primer grupo de migrantes que cruzaban ilegalmente el Canal de la Mancha y que los devolverán a Francia en virtud de un nuevo plan piloto. Los inmigrantes fueron detenidos el miércoles, día en que entró en vigor el plan, y serán retenidos en centros de expulsión de inmigrantes hasta que sean devueltos a Francia.

«Con ello se envía un mensaje a todos los inmigrantes que están pensando en pagar a bandas de delincuencia organizada para llegar al Reino Unido: estarán arriesgando sus vidas y tirando su dinero si se suben a una pequeña embarcación», declaró en un comunicado la ministra británica del Interior, Yvette Cooper.

Según el plan, Francia aceptará a los inmigrantes retornados a cambio de que el Reino Unido acoja a un número igual de solicitantes de asilo que tengan lazos familiares con Gran Bretaña.

El primer ministro británico, Keir Starmer, y el presidente francés, Emmanuel Macron, anunciaron el acuerdo el mes pasado. Aunque de alcance limitado, las autoridades británicas lo celebraron como un gran avance y afirmaron que sienta un precedente que permite devolver al otro lado del Canal de la Mancha a los migrantes que llegan ilegalmente.

Sin embargo, los críticos afirman que el programa hará poco por disuadir a los migrantes, ya que el número de devueltos a Francia es reducido y las lagunas del tratado permitirán que muchas personas que entran ilegalmente en el Reino Unido permanezcan en el país mientras presentan reclamaciones de derechos humanos.

Los cruces peligrosos se han convertido en una potente cuestión política en el Reino Unido. Más de 21.000 personas llegaron al país en lo que va de año, un 56% más que en el mismo periodo de 2024.

Macron dijo que el acuerdo pretendía tener un efecto disuasorio. «Estoy totalmente comprometido a que funcione, porque se trata claramente de nuestra voluntad y nuestro interés común», dijo.

Entre los posibles desafíos al programa figuran la medida en que el Reino Unido está dispuesto a invertir en la vigilancia policial de las pateras, los posibles desafíos legales en Francia y la oposición de otras naciones europeas.

EURONEWS