Las heladas azotan los cultivos: Italo Tenca advierte sobre la magnitud sin precedentes y sus consecuencias

Las heladas azotan los cultivos: Italo Tenca advierte sobre la magnitud sin precedentes y sus consecuencias

En un análisis sobre el impacto de las condiciones climáticas extremas, Italo Tenca, una voz respetada en el sector agrícola dialogò con radio Tabarè y  emitió una contundente advertencia sobre la magnitud de la reciente ola polar que afecta a la región. Si bien las heladas en las últimas semanas de junio y las primeras de julio son un fenómeno habitual, Tenca enfatizó que la intensidad actual es «realmente muy intensa», con temperaturas que han batido récords y generado consecuencias significativas para los cultivos.

Impacto en los sistemas de protección y cultivos vulnerables

A pesar de que los productores locales han implementado desde hace años robustos sistemas de protección –como techos con agua, doble techo y cielorrasos–, la severidad de esta ola polar ha superado en muchos casos estas defensas. Tenca explicó que el frío extremo ha tenido un «efecto negativo sobre los cultivos», incluso afectando a plantas que, como la frutilla, son típicamente más resistentes al invierno. «Se vio algún efecto que incluso ha quemado hasta… notás que hasta la hoja está un poquito afectada,» detalló, aunque el mayor daño se observa en las flores y los frutos.

La situación es aún más crítica para cultivos hortícolas como el tomate y el morrón, cuyo desarrollo óptimo se sitúa alrededor de los 20°C. A pesar de los esfuerzos por mantener condiciones adecuadas en invernaderos, las temperaturas extremadamente bajas hacen que incluso la protección no sea suficiente para salvarlos.

«Tenés efectos que de repente rápidamente no se ven,» señaló Tenca, pero que se manifiestan días después con un amarillamiento de las hojas y un cuajado de frutos deficiente, resultando en cosechas más pequeñas y deformes. Este efecto es similar al que producen las altas temperaturas, pero en este caso, es el frío extremo el causante.

La producción antes del frío y las consecuencias a mediano plazo

Antes de la llegada de esta intensa ola de frío, la producción en general venía «bastante normal». Tenca mencionó que el mismo mercado mayorista reflejaba esta situación con una «oferta importante y sostenida», lo que indicaba un abastecimiento regular. Sin embargo, el impacto de las heladas no se verá de inmediato en todos los rubros. Debido a los procesos biológicos que tardan entre 15 y 20 días, e incluso un mes en algunos casos, «va a haber fruto que no va a estar en distintos rubros», advirtió.

Algunos cultivos, como el zapallito de tronco, ya han experimentado una merma «astronómica» en los últimos días. Tenca explicó que esto se debe a dos factores principales: el frío intenso, que impide el vuelo de las abejas y, por ende, la polinización, y la falta de cuajado de los frutos. En el caso del tomate y el morrón, si bien puede haber una merma en la maduración sin un quemado intenso, el problema más grave radica en el «quemado a nivel de la planta». Muchos racimos ya no existirán, y las frutas que recién estaban cuajando, las que eran más pequeñas, no estarán disponibles en un plazo de 30 o 40 días.

Faltante inevitable en el mercado

A pesar del arduo esfuerzo de los productores, Tenca fue contundente al afirmar que una «faltante en el mercado» es «inevitable». Aunque la magnitud exacta de esta merma aún está por determinarse, es una certeza que la oferta se verá afectada. Esta situación subraya la vulnerabilidad del sector agrícola ante fenómenos climáticos de esta envergadura, incluso con las mejores prácticas de protección implementadas.

La comunidad agrícola y los consumidores estarán atentos a cómo evoluciona esta situación en las próximas semanas, a medida que los efectos completos de la ola polar se manifiesten en la disponibilidad de productos frescos.