El legado de la esclavitud persiste a través de la desigualdad y sistemas penitenciarios opresivos
La segunda sesión del foro sobre afrodescendientes ha empezado su andadura en Nueva York reafirmando la necesidad de erradicar el racismo que deja profunda cicatrices en las sociedades.
«El racismo y la xenofobia siguen arruinando nuestras comunidades, como cicatrices que echan a perder el tejido social. El odio y la violencia que engendran persisten, exigiendo nuestros esfuerzos colectivos para erradicar la violencia racial en todas sus formas», dijo Csaba Kőrösi en la segunda sesión del Foro, que se inauguró este martes en Nueva York.
Transformar la injusticia
Kőrösi aseguró que para superar esto es necesario reconocer nuestra humanidad compartida, ya que los «legados no reconocidos» de la esclavitud y la segregación persisten hoy en día a través de sistemas penitenciarios opresivos y racialmente violentos, desigualdades en el acceso a la atención sanitaria y exclusión de la mano de obra.
«Debemos acabar con estas herencias inhumanas y vergonzosas, y debemos hacerlo ahora», afirmó en su intervención en el Salón de la Asamblea General. «Creo firmemente que reflexionando sobre estas dolorosas herencias, podemos transformar realmente las injusticias del pasado en las libertades del futuro», añadió. (ONU)