Paysandú: «La lucha que comienza con cada amanecer siempre paga”

El intendente Nicolás Olivera presentó una rendición de cuentas de su primer año de gobierno, en el Espacio Cultural Gobbi, donde reveló que al ingresar “teníamos en caja 32.453 pesos menos de los necesarios para pagar los salarios” de noviembre de 2020. También dijo que “había un sensible deterioro en los bienes municipales, sean internos como plazas y paseos públicos”. Explicó que encontró “los recolectores en estado crítico y una sola barométrica y 400 pozos llenos sin poder brindarles servicio. Por eso adquirimos cuatro recolectores más, dos que llegaron y dos que llegarán”. De hecho “estábamos en emergencia vial. Solamente el 41% de la maquinaria estaba en condiciones de ser utilizada. Invertimos en su mantenimiento, entre 60 y 70 millones de pesos hasta ahora”. Reiteró su “decisión inamovible: vamos a cerrar el actual Vertedero”. En vialidad urbana se han recuperado 736 “a un ritmo de 2.01 por día calendario” aun cuando deben recuperarse otras 2.148 cuadras en la ciudad. En caminería rural se realizaron trabajos en 800 kilómetros. Para reforzar el equipo vial se invierte 3,5 millones de dólares. Destacó también “la decisión de construir una nueva sede para Vialidad, donde está la planta asfáltica, con una inversión de varios cientos de miles de dólares”. (El Telégrafo)