Hallaron cuerpo de Rosina Tonarelli oculto bajo escombros en Guichón

Conmoción ha generado la noticia del hallazgo sin vida de Rosina Tonarelli, de 33 años, quien estaba ausente de su hogar en Guichón desde el pasado 13 de agosto. Las pistas que había manejado su entorno permitieron dar con su cuerpo en un lugar que había sido recorrido ya en varias ocasiones. En la víspera, pasadas las 17 horas, EL TELEGRAFO obtuvo información de que familiares de la mujer —quienes nunca cesaron en su búsqueda— habían hallado un cuerpo cuyas características (pese al estado de descomposición) llevaron a pensar que se trataba de Rosina.

Datos recabados por este medio permitieron saber que este domingo la Policía volvió a detener a un hombre vinculado a Rosina, una de las últimas personas que fueron vistas con ella antes de su desaparición. Ante este hecho, familiares volvieron a salir a recorrer lugares por donde ya habían buscado. Se dirigieron así al lugar conocido como “El Mirador”, donde antiguamente estuvo el basurero de Guichón, a unos 100 metros de barrio Sur. Inspeccionaron el terreno hasta que en un montón de escombros percibieron un olor diferente; al retirarlos, vieron cabello, parte del pecho, un brazo y una mano con un anillo similar a uno que usaba Rosina.

De inmediato se dio aviso a la Comisaría de Guichón, cuyos efectivos concurrieron al lugar y establecieron una zona de exclusión de 200 metros a fin de desplegar con tranquilidad la tarea con Policía Científica, el fiscal y el jefe de Policía Eduar Alvez (en la foto, trabajando en la escena). Se aguarda para la presente jornada la realización de la autopsia y el reconocimiento de familiares directos para confirmar en forma oficial la identidad de la occisa. (EL TELEGRAFO)