Cerca de 800 entidades critican la ‘desmembración’ de la política medioambiental por parte del Parlamento brasileño
Un conjunto de aprobaciones antiambientales conmociona a ambientalistas nacionales y foráneos.
Un manifiesto firmado por 790 entidades —entre ONG, universidades, movimientos sociales y asociaciones— pide a los líderes políticos de Brasilia corregir errores en la MP 1.154, cuya versión aprobada por la comisión mixta del Congreso de los Diputados el miércoles (24) ha vaciado el MMA (Ministerio de Medio Ambiente) y el MPI (Ministerios de los Pueblos Indígenas).
«Votar a favor de estos errores significa apoyar la reducción de la capacidad de Brasil para combatir la deforestación, asegurar el equilibrio en el uso múltiple del agua y garantizar la efectividad de los derechos constitucionales de los pueblos indígenas y la protección de los derechos humanos», reza el manifiesto.
Los puntos criticados son el retiro de competencias del MMA sobre el CAR (Registro Ambiental Rural), la ANA (Agencia Nacional del Agua) y el manejo de residuos sólidos y saneamiento, además de la pérdida de dos atribuciones fundamentales del recién creado Ministerio de los Pueblos Indígenas: la demarcación de las tierras indígenas y la administración de la Funai.