Brasil considera decadentes a opositores venezolanos e invierte en nuevos nombres
El asesor Celso Amorim no se reunió con líderes como Capriles y Guaidó en reciente viaje al país.
El viaje del asesor internacional de la Presidencia, Celso Amorim, a Venezuela, fue una iniciativa del presidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT), que pretende consolidarse como mediador de los problemas globales al inicio de su mandato.
También forman parte de esta política la sugerencia de Lula de crear un «club de la paz» para poner fin a la guerra en Ucrania y los gestos de mediación para la crisis en Nicaragua.
Amorim se reunió este miércoles (8) con el dictador venezolano, Nicolás Maduro, y también con líderes de la oposición.
El excanciller brasileño, sin embargo, evitó el contacto con figuras más conocidas en el campo anti-Maduro, como el excandidato presidencial Henrique Capriles y el autoproclamado presidente interino Juan Guaidó. El balance en el gobierno de Lula es que actualmente son líderes decadentes y poco representativos.
En su lugar, Amorim conversó, entre otros, con el abogado y exdiputado Gerardo Blyde, quien ha participado en la mesa de negociaciones entre la dictadura y la oposición venezolana. (FOLHA INTERNACIONAL)